sábado, 15 de diciembre de 2007

¿Una nueva modalidad laboral?

Una vecina amiga me contó que a su madre le ofrecieron 50 pesos en la puerta de una sucursal del Banco Nación en provincia, mientras hacía la cola para cobrar sus haberes jubilatorios. Le pregunté con qué fin esa persona le había hecho la propuesta. Me contestó: “Le vendía uno de los primeros números de la cola”. Aclaro, a todos aquellos que no entiendan el porqué, que las colas para ese trámite consumen alrededor de tres o cuatro horas del tiempo de los abuelos (o el familiar autorizado a realizar dicha tarea). Entonces me pregunté: ¿Estamos ante un nuevo tipo de “trabajo”?. Voy temprano, hago la cola, y me gano en una o dos horas 50 manguitos, mucho más de lo que me pagarían en un trabajo informal. Llevo un par de amigos o familiares, y el monto alcanza un número para nada desechable. En 22 días (descuento los fines de semana), son 1.100 pesos, un sueldo. ¿No hay quien lo sepa?. En cada banco, con un sólo jubilado por día (y 22 al mes), creo un puesto de trabajo: ¡Aleluya, no hay que ahorrar más dinero del gasto público!
Y después la gente se queja de que no hay trabajo. Algún abuelo que cambie la odisea de aguantar la interminable fila de cobradores por “sólo 50 pesitos”, estará olvidando que ese mes comprará cuatro kilos menos de nalga (o sea, lo que consume durante los 30 días), o regalará el 30 por ciento de “uno” de sus medicamentos, o pagará el doble de teléfono, o es agraciado y se trata de un anciano que gana tanto más que los otros, que se permite vivir con ingresos que no superan el límite de la pobreza.
Estamos tan acostumbrados a toparnos con este tipo de “buscas”, que no nos sorprende. Quizás alguien piense: “Este pibe es un boludo. Mirá lo que dice”. De lo que estoy seguro es que la “viveza criolla” no conoce límites. Si antes nos quejábamos porque le pegaban a los abuelos para robarles 100 pesos, ahora debemos aplaudir porque la delincuencia “se apiadó” de los queridos viejos. Y, en ese caso, sí sería un boludo.
Le pido a las autoridades del Banco de la Nación Argentina que chequeen estos casos. Que pongan a sus custodios en la cola a ver qué pasa.
Y al Ejecutivo Nacional. Que no siga aplaudiendo los “aumentos fantasma”.Que los abuelos muchas veces no quieren pensar que a ese incremento lo licuó la inflación. Se creó una nueva modalidad de trabajo. Cumplió la demagogia.
Gastón Ariel Vega 14/12/2007

jueves, 13 de diciembre de 2007

¿Qué país tendremos?


Foto:Ricardo Castiñeira, a quien conocí en Casa de Gobierno y apoyo con una muestra de su "ojo clínico".

Los casi 3,1 millones de votos (sólo provincia de Buenos Aires) que consiguió la senadora y presidente electa Cristina Fernández, son la ofrenda que las clases bajas y parte de las capas medias del país le entregaron en pos de conservar lo que con tanto esfuerzo han conseguido.
Sin embargo, no debemos olvidar que más del 25% - votó el 72.61% - de la población de la Provincia de Buenos Aires, no se sintió identificada con las opciones electorales y no cumplió con su deber y derecho cívico. Con el agravante de que se incrementó en al menos 5 puntos –en la escala nacional- el porcentaje de deserción con respecto a las presidenciales de 2003, en las que fuera electo el actual presidente Néstor Kirchner, luego de que el ex presidente Carlos Menem no aceptara presentarse al ballotage.
La confianza depositada en Cristina forma parte de una línea sucesoria que sin dudas ha hecho mucho por el país en materia de derechos humanos y reivindicaciones a las clases postergadas.
Sin embargo, quedan pendientes de solución algunos temas en lo que respecta a la economía, la Iglesia e inversiones extranjeras, sobre todo con los Estados Unidos. Los últimos problemas estarían esbozando – aunque sea de manera provisoria- los lineamientos para su solución. La senadora ha instado al pueblo argentino y a sus funcionarios a no generar conflictos, a poner la otra mejilla. La Iglesia vio con buenos ojos, primero su pronunciamiento en contra del aborto y su discurso conciliador e integrador tras los comicios de octubre, por lo que la Conferencia Episcopal Argentina envió una carta felicitándola por su inobjetable triunfo.
Lo propio hizo el actual presidente de los Estados Unidos, George W. Bush a través de un llamado telefónico, aunque las intenciones de reconciliación fuesen luego desmentidas desde la Casa Blanca.
En materia económica, el FMI ha dado ya los consejos que deberá seguir la Argentina para “controlar la inflación”, ya que según el organismo, nuestro país crecerá –si bien en un porcentaje menor al actual- durante 2008: se especula con que el desarrollo económico alcanzará el 5,5 %, contra el 7,5% de este año. Las indicaciones produjeron efectos inmediatos en el Ejecutivo nacional, por lo que la primera dama piensa acelerar la implementación de un nuevo sistema de medición de inflación en el Indec, que tendrá como modelo el de los Estados Unidos, en el que se eliminarían los precios estacionales.
Con el objetivo de bajar algunos precios internos y dejar un panorama fiscal más aliviado a su esposa, Kirchner avanzó por pedido de la presidenta electa en la toma de algunas medidas concretas: aumento en las retenciones en trigo, soja y maíz .
También confirman en la Casa Rosada que hay que pensar en retoques "pequeños y graduales" en tarifas de gas y energía eléctrica a los sectores de altos ingresos, mientras que en los segmentos de menores recursos se fijaría una tarifa social.
Argentina es el segundo país con mayores problemas de inflación en América latina después de Venezuela, según las Proyecciones de la Economía Mundial-Octubre 2007. Para este año, el FMI estima que la inflación será del 9,5% y de 12,5% para 2008. El jefe de Gabinete, Alberto Fernández, sostuvo que "la inflación en los últimos 12 meses ronda el 9,8 por ciento" y que el dato surge de la información brindada por el Banco Central "respecto a todas las consultoras económicas del país". De igual modo, pronosticó una inflación de 10,8% para 2008.
Para la próxima gestión, Cristina anticipó que priorizará las políticas de seguridad con programas económicos de inclusión social, la lucha contra la pobreza y la desocupación.
Sobre política exterior dijo que profundizará la relación del Mercosur y que buscará un acercamiento mayor en la región en materia energética.
Además, Néstor Kirchner buscará desacelerar el crecimiento y el gasto social, por lo que se espera una merma en las obras públicas. Por otra parte, el presidente intentará acelerar las negociaciones con el Club de París para reprogramar la deuda de 6.300 millones de dólares, aunque se sabe que ese acuerdo no se cerrará hasta después del recambio.
En lo que respecta a la prensa, Cristina Fernández prometió un tratamiento más duro que el dado por el gobierno desde 2003. Es más, le reclamó “una revisión” de lo que el periodismo ha escrito sobre los Kirchner y su relación con Santa Cruz. “Creo que los medios de comunicación deberían hacer una revisión de esto, porque la democracia exige un sistema comunicacional transparente, donde los medios de comunicación sean de comunicación y no de posición”, señaló la senadora.
No hay que olvidar que la primera actitud que tomó la primera dama al ser confirmada como candidata fue visitar a los jefes de Estado y empresarios más importantes de Europa.
Según lo expuesto, nos encontraríamos frente al país que ya conocemos. Con algunos retoques en las relaciones internacionales. Para alegría unos. Y tristeza de otros.
Gastón Ariel Vega 05/11/2007

La seguridad será tema central de la agenda de Scioli

En la ciudad de La Plata, y acompañado por el ex presidente Néstor Kirchner, Daniel Scioli juró como nuevo gobernador de la provincia de Buenos Aires. "El juramento que acabamos de pronunciar sella un pacto inalterable, por el que nos comprometemos a honrar el voto de confianza recibido de los millones de hombres y mujeres de toda la Provincia, que acudieron a las urnas", fueron sus primeras palabras.
Tras asumir su cargo con “la convicción de reestablecer la seguridad”, realizó un breve desarrollo de los proyectos en esta materia, a saber: contar con el apoyo del Gobierno a través de recursos que restablezcan el respeto y la confianza en la policía; optimizar el sistema central de emergencia 911, de manera que se convierta en una herramienta integral de protección social y que interactúe con el seguimiento satelital de los patrulleros. Asimismo, indicó que: "No admitiremos demoras de ningún tipo cuando lo que esté en juego sea la vida de la gente honesta y digna. Necesitamos derrotar a quienes envenenan a nuestros hijos desde sus cocinas del paco, a quienes matan a nuestros hermanos por un auto que desmantelarán en un desarmadero ilegal y a quienes secuestran a nuestros familiares para asesinarlos escondidos en sus aguantaderos".
Además, el gobernador invitó a los bloques de la oposición a trabajar en su proyecto. "Confiamos en contar con una oposición constructiva, que nos ayude a alcanzar los consensos necesarios para atacar el núcleo duro de la pobreza, el desempleo y la indigencia", dijo.
Por otra parte, remarcó el proyecto económico que llevará a cargo, especialmente en el área industrial, pymes y el sector rural. Al respecto, señaló que "la nueva Secretaría de Promoción de Inversiones, Exportaciones y Cooperación Internacional es una poderosa plataforma para cumplir con el compromiso adquirido de que haya más Provincia en el mundo y más mundo en la Provincia".
Gastón Ariel Vega 11/12/2007

miércoles, 12 de diciembre de 2007

“Queremos que todas las casas tengan agua potable”

El secretario de Obras Públicas de la municipalidad de Florencio Varela, Tomás Vanrell, repasa la gestión de los últimos cuatro años en relación a las obras realizadas, promete más cloacas, agua potable y asfalto, y no descarta la posibilidad de convertirse en el futuro jefe comunal de Varela.

¿Cuál es la función de la Secretaría de Obras Públicas?
La Secretaría cuenta con dos partes: una de obras y otra de servicios. La de obras se ocupa de planificar todas las tareas que tienen que ver con el alumbrado público, el pavimento, las obras hidráulicas. En definitiva, todo lo nuevo. Mientras que la de servicios se ocupa del mantenimiento de las calles, limpieza, espacios verdes, recolección de residuos, entre otras cosas. Hay sectores que se ocupan del desarrollo urbanístico, otra de la infraestructura de agua y cloaca, entre otras. En resumen, planea las obras, las ejecuta y se encarga del mantenimiento.

¿Los baches se rellenan para que aguanten uno o dos meses? Porque hay casos...
No, para nada. Si el trabajo implica reconstruir la base, lo que se hace es aportar suelo seleccionado, cemento y después compactar y colocar la banda de rodamiento. Si no hace falta reconstruirla, se limpia, se seca y se aplica el concreto asfáltico.

¿Cuáles fueron las obras más importantes de los últimos cuatro años?
El Hospital El Cruce es una de las más importantes, por lo que significa en términos de política sanitaria y como obra emblemática. La Novak, siete kilómetros de pavimento, obra estratégica para el distrito. La peatonal Monteagudo, en cuanto a inversión mucho menor a las dos anteriores, pero muy importante para los habitantes. Otras obras importantes fueron la red de pavimentación de la avenida Hudson, la Thevenet, la Lavalle. Dentro de las obras hidráulicas, sin dudas la del arroyo Giménez. No debemos olvidar también las viviendas, de las que ya estamos terminando casi 5 mil, y las plazas.

¿El gobierno nacional les entregó los 16 millones de pesos que les adeudaba?Si, queda un poquito. El problema fue la burocracia de la transferencia. Si Dios quiere, antes de fin de año terminaremos de hormigonar el tramo que falta para terminar con la avenida Thevenet.

¿Cuánto costará el paso bajo nivel San Martín-Eva Perón?
El presupuesto oficial es de 25 millones de pesos, financiado con el aporte del gobierno nacional, a través de un crédito con el Banco Interamericano de Desarrollo.

¿Cuál es el porcentaje de casas que no tienen agua potable?
El 40 % no tiene agua potable. Tenemos una cobertura del 60 % que esperamos transformar al 100 % de acá al 2011, de aguas y cloaca. De hecho, en este momento estamos con una obra de 100 millones de pesos financiada por el gobierno provincial, que nos va a permitir llegar al 80 %.

¿En qué temas de infraestructura hay que centrar la gestión de los próximos cuatro años?
En el asfalto. Hemos hecho mucho, pero todavía falta. El intendente Pereyra está desarrollando un plan muy ambicioso por el que estaremos llegando al 100 % en 2011.

¿Cuál es el porcentaje de asfalto en la actualidad?
Hoy estamos en el 35 %. Además, será importante la iluminación, espacios públicos, pasos bajo a nivel como el de Ituzaingó y Brasil. Otra obra grande que tenemos en carpeta y para la que existen grandes posibilidades de financiamiento por parte de la Provincia, es la ampliación de la Ruta Provincial 53.

¿Cómo se ve dentro de cuatro años?
Me veo formando parte de un proyecto político como el que formo ahora, que pueda seguir teniendo las herramientas necesarias para mejorar la calidad de vida de los varelenses. Desde el lugar que me toque poder ayudar con lo que se, y para lo que me formé. Estos cuatro años que pasaron nos permitieron consolidar un modelo de gestión, un proyecto político.

¿Le gustaría ser intendente de Florencio Varela?
Es una posibilidad. Pero yo no trabajo por el cargo, sino por lo que el cargo me permite hacer. Si el proyecto político de Julio Pereyra me necesita en ese rol, lo aceptaré. Siempre para que el proyecto político en su conjunto pueda mejorar la calidad de vida de los habitantes.
Gastón Ariel Vega 25/11/2007

“Hay disparadores de violencia en todos lados”

Francisco Capellano, jefe de Seguridad del club All Boys, reveló a este blog el éxito de su gestión, y apuntó a la platea, árbitros y jugadores como generadores de violencia.

¿Hace cuánto trabaja en All Boys?
Mi trabajo comenzó hace seis años durante el primer año de mandato de Bugallo (Horacio), por su decisión, ya que el club era tierra de nadie. Habían intentando anteriormente contratando empresas de seguridad, pero los resultados no fueron satisfactorios. Me recomendó gente que sabía que yo había trabajado en custodia.

¿Cómo fueron los primeros tiempos?
Bastante duros, porque la gente desconfía, no me conocían. Entonces, comencé a tener contacto con referentes de la hinchada para conocerlos, y transmitirles cómo era yo. Había que ponerse de acuerdo para trabajar por el bien del club, siempre respetando algunos códigos. Sobre todo con respeto. Fueron muchas horas de trabajo previo a los partidos de entonces.

¿Y qué pasó entonces?
Los muchachos comenzaron a darse cuenta que Francisco Capellano, si bien no era su amigo, tampoco era un “botón”. Simplemente quería hacer las cosas bien para que el club quede bien parado. Hace tres años comenzamos una nueva etapa, en la que nos teníamos más confianza y pude meterme más en sus vidas: me preocupé por encargarme de protegerlos en sus viajes de visitante y les exigí que cuando llegasen a Floresta luego del partido me avisen por celular que estaban bien.

Se transformó un poco en su “padre”...
No, me cuesta mucho criar a mis hijos, así que imaginate a los que no son. Pero les transmití que ser “vivo” o “pillo” es volver de una cancha y de ahí a sus casa y reencontrarse con sus familias. Esto fue un éxito y por ello All Boys hace tres años que no recibe ninguna sanción por hechos de violencia.

¿En qué modelo basó su sistema de seguridad?
Me basé en mi propio modelo de seguridad, que podría haber funcionado o no.
Cada uno tiene sus modelos para cada club. A veces no son personales porque se les baja línea de las dirigencias, por lo que quedan atados a las decisiones de los directivos. Esto no pasa en All Boys. Lo más importante es que te digan: “Haga lo que tiene que hacer, nosotros como dirigentes lo acompañamos”. Hay algunos jefes de seguridad que están pintados.

¿Cómo es su trabajo?
De local trabajo adentro del campo de juego. Una semana antes armo el operativo de seguridad con el comisario las zonas donde quiero los policías. Además manejo al personal que está dentro de la cancha. Es mi responsabilidad ante el Gobierno de la Ciudad, la Policía Federal, el árbitro, la gente de la camilla, de la manga, los jugadores, alcanza pelotas. Hay que tener mucho cuidado porque nunca sabes dónde vas a tener un disparador de violencia.

¿Cuáles pueden ser esos “disparadores”?
Nos pasó la vez pasada con Atlanta. Les preparamos un palco especial para ellos, les pusimos siete policías y lo espejamos para que la gente no vea quién está ahí. Y Cristian Castillo se manda un disparate. Se va a otro palco y grita el gol del empate, pegándole un trompazo al vidrio. Como no se rompe, le pega dos puñetazos más, se rompe el vidrio y cae sobre la platea de vitalicios. Se dispara por el lugar menos esperado. También recuerdo el caso en que un camarógrafo de Torneos y Competencias gritó un gol también de Atlanta y se le fueron todos al humo.

¿No deben revisarse los sujetos a los que se vigila? Es decir, a quién vigilar...
Los organismos de seguridad van a tener que modificar las actitudes. Es algo que discuto siempre en la Secretaría de Seguridad, y a algunos no les gusta. Siempre apuntan su infraestructura a donde está la hinchada. Hoy el disparador de más violencia está en las plateas. También los encontramos en el árbitro con un mal día, jugadores que incitan a las hinchadas. En todos lados.

¿En qué basa el éxito de su gestión?
Sin dudas, y sin pecar de discriminador, la clase social que marca al hincha de All Boys. El hincha está en una zona de clase media, y por ende su gente pertenece a ese círculo social. Esto hace que al hincha se le pueda hablar, sea más pensante. Muchos de ellos, (que los conozco) son muy inteligentes. Este no es un hincha de armas, pelean a los puños. Almirante Brown, por ejemplo, tiene una división partidaria que hace tiempo que lucha contra esto. Hubo heridos de bala, inclusive entre ellos, por la división de la barra. El hincha de All Boys entiende lo que es el amor por la camiseta y sabe cuándo parar.

¿Cómo se para la violencia?
Primero, el gobierno de turno (no va dirigido a ninguno en particular) tiene la obligación de solucionar el tema de afuera: de la calle. Se perdieron los códigos, le pegan a los ancianos. Ladrones hubo siempre, pero con códigos. La violencia es incontenible. Inclusive, se han perdido códigos por parte de la policía: hay comisarios que mientras haya un billete de por medio, no le hacen asco a nada. Si esto no se puede parar afuera, menos en una cancha.
Sanciones duras es lo que falta, y para todas las edades. No se soluciona poner más policías y reprimir a la entrada y salida. Eso no modifica la cabeza del barra.

Gastón Vega 08/12/2007